El balanceo es fundamental para la comodidad en el manejo y para extender la vida útil de los neumáticos. Cuando hay desbalanceo se generan vibraciones, provocando fatiga al manejar, desgaste prematuro de los neumáticos y desgaste innecesario de la suspensión del vehículo.
También deben ser balanceados al ser montados por primera vez sobre las ruedas o al ser remontados durante una reparación. Los neumáticos deben ser rebalanceados a la primera señal de vibración o sonido.